Revista Digital de Investigación y Postgrado, 5(10), 233-246
ISSN Electrónico: 2665-038X
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la presencia del ciberespacio, se caracteriza por promover un ciudadano, que se mantiene en cons-
tante conexión, adentrándose en un cosmos multicultural, donde no se limita en obtener y/o producir
conocimiento asociado a su contexto inmediato, por lo que se mantiene una visión multireferencial
que transcendé a sus barreras físicas y promueven un pensamiento que desdibuja fronteras e inducen
a una visión sin limitantes tradicionales.
Para el investigador social, el ciberespacio es una forma de expresión, convergencia y reflexión, brinda
a sus usuarios la oportunidad de exponer desde diferentes latitudes sus paradigmas e integrar en un
nivel superior sus ideas, y pensamientos, involucrando un discurso reflexivo e integrador que no de-
sestime su localidad, pero considere aspectos inherentes a la educación planetaria descrita por Morín,
lo cual promueve una postura glocal, es decir, un equilibrio entre lo global y local, esta relación no
busca generar una teoría absoluta, se orienta en buscar realidades relativas que hagan denotar la
ambigüedad fundamental de todo ser humano.
Lo descrito, apunta tal como señala Maffesoli (1979), a una sociología comprensiva, que requiere una
ruptura de un positivismo dominante y totalitario, y generar investigaciones sobre la cotidianidad,
cuyas trivialidades promueven investigaciones distintas y complementarias. Para ello, se requiere un
desapego de toda postura paradigmática, ya que estas constituyen sesgos que impiden avizorar la
cotidianidad del ciberespacio como una fuente de estudios profusa.
Desde el Telos de la migración paradigmática, el investigador debe mantenerse en movimiento, man-
teniendo una postura reflexiva y abierta. La reflexividad garantiza que el individuo este consciente de
los paradigmas existentes y sus posibilidades, mientras que la apertura impide un aferramiento a una
forma determinada de pensar, pues dificultad la llegada de otros paradigmas y la edificación de es-
tructuras de pensamiento propias, que constituyen alternativas paradigmáticas ante lo existente. En
términos investigativos, se trata de mantenerse en movimiento, consciente de la realidad paradig-
mática sin recaer en el apego, afiliación o establecimiento de una zona de confort, que se restringe
a una estructura gnoseológica, metodológica e incluso teleológica especifica que conduce a un de-
sarrollo lineal, secuencial, que ponen en detrimento diversas posibilidades de brindarle libertad al
pensamiento.
En este canon, la libertad del pensamiento obedece a un estado de cambio y conciencia, ya que
para conocer si el hombre es libre, debe estar consciente de las posturas que impiden tal condición.
En el quehacer investigativo, algunos investigadores como Balza (2020), establecen que la libertad
de pensamiento de un investigador, debe conducir a un estado de desobediencia paradigmática,
una irreverencia epistemológica para separarse de la hegemonía del pensamiento único, pertene-
ciente a la racionalidad científica.
Estas situaciones, permiten al investigador estar conscientes de los paradigmas instrumentales aso-
ciados a la matemática, física e informática que constituyen las bases estructurales del ciberespacio.
Mas como señala Martínez (2015), no pueden ser utilizados o concebidos como parámetros de las
ciencias de la Vida. Tampoco se trata de negar el valor disciplinario que poseen, sino subrayar su di-
mensión no exhaustiva en la investigación humana, por tanto, el estado de conciencia, permite al in-
El ciberespacio y la investigación emergente: una visión transepistémica y
transdialógica desde la transcomplejidad